sábado, 23 de marzo de 2013

IV DÍA DE LA POESÍA EN SEGOVIA


Amparo García-Otero leyendo su poema en el IV Día de la Poesía en Segovia.

Hoy celebramos el IV Día de la Poesía en Segovia, un certamen poético ya internacional en el que se seleccionaron veintidós poemas que posteriormente se han publicado en un libro conmemorativo de la jornada. Voy a transcribir el poema con el que me seleccionaron y que leí en el acto celebrado en el Palacio de Quintanar. Está dedicado a la memoria de mi padre. Más o menos quiero decir que cuando alguien se va, deja la huella de su "no presencia" en los lugares que antes frecuentaba, en el sillón vacío, en el recuerdo y, en definitiva, por el hecho de existir, todos dejamos en este mundo "huellas de silencio".

Huellas de silencio.

La muerte nos llama con ojos de noche
un día cualquiera.
Ángeles de bronce
corren las cortinas
de nuestros espejos.
Llevamos a cuestas la última partida,
corazones rotos,
fuego ensimismado sobre las cenizas
de nuestro recuerdo.

Pero entre las flores permanecen siempre
estatuas de ausencia.
Porque una vez fuimos, ya siempre seremos
seres inauditos que posan sus plantas
sobre los jardines,
entre los insectos y las caracolas,
a lomos del viento
sobre las terrazas y los anaqueles.

Porque una vez fuimos,
ya seremos siempre
huellas de silencio.

(Amparo García-Otero)


Gracias a Norberto García Hernanz por el empeño y la ilusión con la que prepara cada año esta jornada poética. El libro con los  poemas seleccionados ha quedado muy bonito.

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